La capacidad atlética se expone contra el talento
Francia y Bélgica chocarán hoy en San Petersburgo en la primera semifinal del Mundial de Rusia, un partido que opondrá dos visiones del fútbol distintas: la capacidad atlética de los galos contra el talento ofensivo de los "diablos rojos".

Los belgas, de la mano del seleccionador español Roberto Martínez, alcanzan unas semifinales mundialistas por la segunda vez en su historia. En la primera, en 1986, la Argentina de Diego Maradona les privó de la final. Esta vez, y tras dos fracasos consecutivos en el Mundial 2014 y la Eurocopa 2016, la generación dorada belga parece llegar en plena madurez y tiene la chance histórica de luchar por el título. "Roberto Martínez ha dado a esta generación la cultura del triunfo, era lo que le faltaba" a los Eden Hazard, Kevin De Bruyne, Thibaut Courtois, Vincent Kompany, Romelu Lukaku y compañía, aseguró en una entrevista a la AFP Jean-François de Sart, el técnico de la selección olímpica que alcanzó las semifinales en Pekín 2008 y que ya contaba en sus filas con varios de los integrantes actuales del equipo. "Además, por el hecho de ser español, ha acabado con el comunitarismo habitual en Bélgica, donde la prensa flamenca criticaba a los seleccionadores francófonos y al revés", destacó De Sart. En tanto, como Martínez no domina ninguno de los idiomas oficiales en el país, los jugadores tampoco están divididos en grupos según su idioma de origen, ya que el habitual en el vestuario es el inglés, como pasa habitualmente en los clubes. El gran juego desplegado por los belgas en este Mundial ha aparcado todas esas disputas que les habían llevado al fracaso en anteriores torneos.

Bélgica es el equipo que más goles ha marcado en la competición (14 en cinco partidos) y hasta nueve jugadores han festejado en el torneo. Es también el único que ha ganado todos sus partidos y mantiene una racha de 24 sin perder (19 victorias y 5 empates), un récord para la selección. Frente al derroche de talento ofensivo, Francia opondrá su fortaleza defensiva, que nace de la extraordinaria capacidad atlética de sus jugadores, sobre todo en el centro del campo con NGolo Kanté, Paul Pogba y Blaise Matuidi, que debería regresar al equipo tras cumplir un partido de sanción en cuartos contra Uruguay. Los galos apenas sufrieron cuatro goles en cinco partidos (y tres de ellos en la victoria sobre Argentina por 4-3 en los octavos de final), dejando la portería a cero en tres, por lo que no parece probable que Didier Deschamps introduzca cambios en la defensa. Tampoco que modifique su tridente ofensivo, dado el valor que el seleccionador da al trabajo realizado por Olivier Giroud para que brillen las dos estrellas galas, Antoine Griezmann y Kylian Mbappé. Los dos países vecinos se enfrentarán por 74ª ocasión en su historia y los belgas dominan por 30 victorias a 24, pero las dos veces que se enfrentaron en un Mundial (1938 y 1986) el triunfo fue para los galos. Claro que en ninguna de ellas se jugaba algo tan importante como la clasificación para la final de un Mundial.
Otro excluidoen Croacia
Ognjen Vukojevic, analista de video en el cuerpo técnico de Croacia, fue marginado de la delegación por el resto de la Copa del Mundo 2018, después de la polémica generada por un festejo proucraniano en la victoria de cuartos de final de la "cuadriculada" ante Rusia, indicó la Federación Croata de Fútbol. Tras la clasificación de Croacia a las semifinales, el defensor croata Domagoj Vida había gritado "¡Gloria a Ucrania!" en un video colgado por el exinternacional croata Vukojevic, miembro del staff en este torneo. Ambos jugadores han militado en el pasado en el Dinamo Kiev ucraniano. El zaguero recibió el último domingo una advertencia por parte de la FIFA. La Federación Croata presenta en su sitio de Internet sus "excusas al público ruso por los actos de un miembro de la delegación croata". "Ognjen Vukojevic -en la foto junto al DT Dalic-y Domagoj Vida piden disculpas por sus declaraciones, en las que en ningún caso han querido hacer referencias políticas", apunta el organismo rector del fútbol croata. "¡Gloria a Ucrania!" es un eslogan de la revolución proeuropea que llevó a la destitución del presidente ucraniano proruso Viktor Yanukovich en 2014 y a una enorme crisis en la relación entre ambos países. El Kremlin oficializó después la anexión de Crimea y los combates entre las fuerzas ucranianas y las fuerzas prorusas han provocado la muerte de 10.000 personas. Vukojevic es el segundo excluido de la delegación croata en Rusia 2018, ya que previamente el entrenador Zlatko Dalic decidió separar del plantel al delantero Nikola Kalinic, quien se negó a ingresar en los últimos cinco minutos del encuentro contra Nigeria por la fase de grupos.