Momento de poner el pecho y esperar que los resultados ayuden
La mala campaña del año pasado, en el que solamente cosechó 6 puntos de los 36 jugados, llevó hoy a Boca Unidos a una situación angustiante al quedar -a una fecha de la finalización del torneo de la B Nacional- en el borde del descenso. Tanto es así que, para evitar la pérdida de categoría, debe primero ganarle sí o sí el lunes venidero a Sarmiento de Junín, en Corrientes, y esperar resultados de otros equipos que también pugnan por evitar el descenso al Federal A. La AFA resolvió que todos los partidos se jueguen el lunes a la misma hora: 15:35, para evitar todo tipo de suspicacias o de ventaja deportiva para algunos.

Indudablemente, la situación es complicada. Más allá de que para este partido, el director técnico Carlos Mayor tendrá a disposición a dos jugadores importantes en la estructura del equipo de Boca Unidos. Ellos son Pablo Vegetti, goleador del equipo con 9 tantos; y el capitán Leonardo Baroni, quienes por estar suspendido una fecha, no jugaron el domingo contra Quilmes (1-1) en Buenos Aires. Hoy, el momento deportivo de Boca Unidos está muy comprometido y necesita de varios factores para poder seguir jugando en la Primera B Nacional: Que el equipo se ilumine y le gane a Sarmiento, primero; y que no saquen buenos resultados en la última fecha los otros cinco equipos que también están en peligro y que son Juventud Unida de Gualeguaychú (1,284), Independiente Rivadavia de Mendoza (1,276), Nueva Chicago (1,272), All Boys (1,261), Mitre de Santiago del Estero (1.260). El promedio de Boca Unidos es 1,261 y ya están descendidos Deportivo Riestra, Estudiantes de San Luis y Flandria. El otro factor es que en el encuentro crucial del lunes ante Sarmiento, la afición futbolera correntina en su mayoría concurra a la cancha a brindarle su apoyo a Boca Unidos, más allá de la rivalidad que pueda tener alguno con el "aurirrojo" en el ámbito local. Mientras tanto, el plantel de Boca Unidos volverá a entrenar hoy con la mira centrada en Sarmiento de Junín. No será un partido más, sino el último. El que determinará si Boca Unidos continúa en la B Nacional o la temporada venidera bajará a jugar en el torneo Federal A. Por eso, el entrenador Carlos Mayor analizará detenidamente cómo están anímica, física y técnicamente los jugadores, para evitar equivocarse en la elección del mejor once inicial ante el conjunto bonaerense, que está a un pasito de lograr la clasificación para disputar el "Reducido" por el segundo ascenso a la primera A, y no va a regalar nada.

--- En Boca Unidos, no podrá jugar Diego Sosa, quien acumuló la quinta tarjeta amarilla frente a Quilmes y una de las alternativas que manejará el entrenador es ponerlo a Gonzalo Ríos como un segunda punta atacando por los costados, en una función que conoce y le gusta, porque es donde tuvo mejores rendimientos. También está Ramiro Maldonado, autor de 3 goles en el campeonato, en su mayoría entrando desde el banco de suplentes. Ese será un aspecto que estudiará bien Mayor en estos días; como también si es que vuelve a reacomodar la línea defensiva con la vuelta de Leonardo Baroni en la punta izquierda, pasando a Tomás Charles al puesto de marcador central junto a Alan Pérez y corriendo al lateral derecho a Rolando Ricardone, o si opta por incluir a Fabio Godoy. En este caso, habría que ver quienes formarán la dupla central de la última línea. Otro interrogante es si insiste con el medio campo que presentó ante Quilmes o le da cabida a otros que cubren esos puestos. Hubo pocos rendimientos individuales buenos en el encuentro contra los "cerveceros", por lo que no sorprenderá si es que Mayor hace algunas modificaciones. Estas son posibilidades que irá disipando el cuerpo técnico en el momento de ordenar fútbol, cuando generalmente da pistas sobre el once inicial. Eso sí. Tratará de no equivocarse en la elección, porque es mucho lo que está en juego. Nada menos que la permanencia de Boca Unidos en la B Nacional.