Corrientes 26 °C
Min. 24 °CMax. 35 °C
 
Para ver esta nota en internet ingrese a: https://www.diarioepoca.com/a/736309

Italia elige alcaldes en medio de denuncias por fondos de migrantes

Más de cuatro millones de italianos votarán hoy en balotaje a los alcaldes de 101 comunas, entre ellas Génova, Lecce, Parma y Verona. Entretanto, algunas investigaciones afirman que la poderosa mafia calabresa se enriquece con los fondos de ayuda a los inmigrantes.

Más de cua­tro mi­llo­nes de ita­lia­nos vo­ta­rán en ba­lo­ta­je a los al­cal­des de 101 co­mu­nas, en­tre ellas Gé­no­va, Lec­ce, Par­ma y Ve­ro­na, en una elec­ción mar­ca­da por la am­plia pre­sen­cia de fuer­zas co­mu­na­les y la au­sen­cia de los prin­ci­pa­les par­ti­dos na­cio­na­les.

RELEVANCIA. ENTRE LAS CIUDADES QUE RENOVARÁN AUTORIDADES HAY TRES CAPITALES DE REGIÓN Y 19 DE PROVINCIA.
RELEVANCIA. ENTRE LAS CIUDADES QUE RENOVARÁN AUTORIDADES HAY TRES CAPITALES DE REGIÓN Y 19 DE PROVINCIA.

Un to­tal de 4.3 mi­llo­nes de ita­lia­nos ele­gi­rán en­tre las 7 y las 23 ho­ras lo­ca­les (en­tre las 2 y las 18 de Ar­gen­ti­na) a los res­pon­sa­bles de los go­bier­nos de 101 co­mu­nas de más de 15.000 ha­bi­tan­tes en las que nin­gún can­di­da­to al­can­zó más del 50% de los vo­tos en la pri­me­ra vuel­ta del 11 de ju­nio. En­tre las ciu­da­des que re­no­va­rán au­to­ri­da­des hay tres ca­pi­ta­les de re­gión (Ca­tan­za­ro, Ge­no­va y L’A­qui­la) y 19 ca­pi­ta­les de pro­vin­cia (A­les­san­dria, As­ti, Be­llu­no, Co­mo, Go­ri­zia, La Spe­zia, Lec­ce, Lo­di, Luc­ca, Mon­za, Oris­ta­no, Pa­do­va, Par­ma, Pia­cen­za, Pis­toia, Rie­ti, Ve­ro­na, Ta­ran­to y Tra­pa­ni). Tam­bién ha­brá ba­lo­ta­je en 10 co­mu­nas de "es­ta­tu­to es­pe­cial", en la nor­te­ña Friu­li, Ve­ne­zia, Giu­lia y en la is­la de Cer­de­ña. Es­tas com­pul­sas si­mul­tá­ne­as ten­drán lu­gar en un mar­co de pre­o­cu­pa­ción de las au­to­ri­da­des por la si­tua­ción de los mi­gran­tes, acre­cen­ta­da por de­nun­cias de "ma­fias" que se for­ta­le­cen con los fon­dos des­ti­na­dos pa­ra ayu­da al sec­tor. Al res­pec­to, un me­dio grá­fi­co in­ter­na­cio­nal re­pro­du­jo en su edi­ción de ayer una en­tre­vis­ta re­a­li­za­da a Fran­ces­co For­gio­ne, un po­lí­ti­co y pe­rio­dis­ta ca­la­brés de 57 años, que de­di­có su ca­rre­ra a do­cu­men­tar los mo­vi­mien­tos de los ham­po­nes de su tie­rra, pa­ra pa­ra con­cluir que "es­ta­mos an­te una ma­fia lí­qui­da", que "hi­zo fren­te a los de­sa­fí­os de la glo­ba­li­za­ción adap­tan­do su vie­jos es­que­mas a los tiem­pos mo­der­nos, con una es­truc­tu­ra re­ti­cu­lar y mo­du­lar". Un gran em­po­rio cri­mi­nal que mue­ve 50.000 mi­llo­nes de eu­ros al año, ca­si el 3% del PIB ita­lia­no. En par­ti­cu­lar, se re­fi­rió a la "‘Ndran­ghe­ta", que una po­de­ro­sa or­ga­ni­za­ción de la ma­fia ca­la­bre­sa ex­ten­di­da por el mun­do con el trá­fi­co de co­ca­í­na, y que ac­tual­men­te "se en­ri­que­ce con los fon­dos de ayu­da a los in­mi­gran­tes". "La ‘Ndran­ghe­ta con­di­cio­na la po­lí­ti­ca, la so­cie­dad, to­do. Aho­ra ha des­cu­bier­to có­mo ga­nar mu­cho di­ne­ro con los in­mi­gran­tes. Es la in­dus­tria de la so­li­da­ri­dad. An­tes uti­li­za­ban a los ex­tran­je­ros pa­ra tra­ba­jar en el cam­po en con­di­cio­nes de es­cla­vi­tud pe­ro aho­ra se ven más ren­ta­bi­li­dad ocu­pán­do­se de la aco­gi­da. Con una hi­po­cre­sía y una fal­se­dad tre­men­das uti­li­zan la asis­ten­cia so­cial pa­ra en­cu­brir sus in­ten­cio­nes ver­da­de­ras", ex­pli­có For­gio­ne. Ad­vier­te de que no es so­lo un ne­go­cio pa­ra los cri­mi­na­les ca­la­bre­ses, ya que en Si­ci­lia hay una in­ves­ti­ga­ción ju­di­cial so­bre el ma­yor cen­tro de in­mi­gran­tes, el Ca­ro di Mi­ne­o, an­te la sos­pe­cha de que es­tá con­tro­la­do por una en­ten­te de po­lí­ti­cos y la Co­sa Nos­tra. El es­que­ma con el que la ma­fia me­tió ma­no en las ayu­das a los in­mi­gran­tes se re­pi­te en mu­chos lu­ga­res. Las par­ti­das de di­ne­ro que lle­ga­ban des­de Ro­ma las ca­na­li­za­ba el cu­ra Scor­dio, se­gún la fis­ca­lí­a, a tra­vés de una ins­ti­tu­ción re­li­gio­sa, Mi­se­ri­cor­dia, que pro­ve­ía de ser­vi­cios y em­pleo (viu­das y jó­ve­nes sin es­tu­dios) al cen­tro de in­mi­gran­tes de Sant’ An­na. En una piz­ze­ría fren­te a su pa­rro­quia, adon­de Edo­ar­do iba a co­mer de vez en cuan­do sin que sus de­vo­tos due­ños le ex­pi­die­ran la cuen­ta, no sa­len de su asom­bro. El pá­rro­co, de 69 años, era un pro­lí­fi­co es­cri­tor. Ha pu­bli­ca­do sie­te li­bros y, de ha­cer­le ca­so a sus pa­la­bras, aho­ra mis­mo ten­dría una so­ga so­bre el cue­llo. En­tre la do­cu­men­ta­ción in­cau­ta­da por la in­ves­ti­ga­ción que li­de­ra el co­no­ci­do fis­cal ita­lia­no Ni­co­la Grat­te­ri fi­gu­ra una fac­tu­ra a nom­bre del pá­rro­co de 132.000 eu­ros por ser­vi­cios es­pi­ri­tua­les, so­lo por lo re­la­ti­vo a es­te año. Un suel­do de di­rec­ti­vo de una mul­ti­na­cio­nal.