Una de acción y una romántica renuevan la cartelera de cine

Día de la Independencia: una vez que utilizaron tecnología alienígena que recuperaron después de la guerra, las naciones de la Tierra han colaborado para crear un programa descomunal de defensa para proteger el planeta. Pero nada nos puede preparar para la fuerza revolucionaria y sin precedentes de los extraterrestres. Sólo el ingenio de unos cuantos hombres y mujeres valerosos podrá devolvernos nuestro mundo, que se encuentra al borde de la extinción. Y un buen día, los extraterrestres volvieron y lo hicieron con todo… con todo lo que les sobró del último intento de invasión. La nueva de Día de la Independencia es más de lo mismo, con la contra de que ya han pasado muchas cintas que explotan el género y todos los condimentos de la primera entrega. Y eso hace que la historia en sí resulte insuficiente y no sorprenda para bien. Quien disfrute del género seguramente la pasará bien y saldrá medianamente satisfecho. Ahora bien, el problema lo tienen quienes, como yo, quieran ver cómo evolucionan la historia y los personajes. Ni fu, ni fá. Eso sí, es uno de los estrenos más promocionados para esta temporada y el pochoclo está a la orden del día.

Yo antes de ti: la estrafalaria y creativa Louisa "Lou" Clark (Clarke) de 26 años vive en un pintoresco pueblo en la campiña inglesa. Sin rumbo en su vida pero con una familia unida, va de trabajo en trabajo para que su familia pueda llegar a fin de mes. Su alegre predisposición se pone a prueba, no obstante, cuando se enfrenta a su desafío laboral más reciente. Al aceptar un trabajo en el "castillo" del pueblo, se convierte en la cuidadora y compañera de Will Traynor (Claflin), un joven y acaudalado banquero que quedó confinado a una silla de ruedas luego de un accidente hace dos años, y cuyo mundo entero cambió dramáticamente en un abrir y cerrar de ojos. El ahora cínico Will, ya no el alma aventurero que alguna vez fue, se ha dado prácticamente por vencido. Eso es hasta que Lou resuelve mostrarle que vale la pena vivir la vida. Al lanzarse juntos a una serie de aventuras, tanto Lou como Will tendrán más de lo que esperaban y sus vidas —y corazones—cambiarán de un modo que ninguno de los dos pudiera haberse imaginado. Está claro que esta cinta existe sólo para aprovechar la figura de Emily Clarke que desde Juego de Tronos viene con una carrera en ascenso. Una historia cuya sinopsis nos recuerda sin más a la Bella y la Bestia. Con fotografía destacada y actuaciones que brindan lo necesario para permanecer pegado a la pantalla con un pañuelo en la mano. Lo que más me llama la atención es que la pareja desde el afiche mismo parece sencilla y como si encajaran a la perfección el uno para el otro.