Una infracción de tránsito en Goya puede costar hasta $60 mil
El Concejo Deliberante de Goya aprobó la reforma a la Ordenanza Nº 9/83 sobre Régimen de Sanciones, imponiendo mayor cantidad de unidades de falta para las infracciones más grandes, quedando entre 20 mil y un máximo de 60 mil pesos conducir alcoholizado; entre 10 mil y 30 mil por conducir siendo menor; entre 10 mil y 20 mil pesos por pasar un semáforo en rojo; y entre 2 mil y 8 mil pesos por participar de picadas y/o exceso de velocidad.

Por unanimidad los concejales de Goya aprobaron el proyecto de ordenanza al que previamente le introdujeron varias modificaciones que fueron previamente consensuadas en Labor Parlamentaria. Kellerman Kalenberg fue el primero el fundamentar el proyecto, y al hacerlo dijo que es simplemente el redactor porque todos los concejales están contestes en la misma, ya que "es una ordenanza sancionatoria a todas las infracciones de tránsito y que se está viviendo una época de crisis en donde no se pueden aumentar impuestos, pero que entendieron que se debe proteger a la mayoría de la sociedad que es la que siempre cumple con las normas de tránsito".
"Sabemos –dijo-, que para lograr un tránsito seguro lo más importante es la educación y la prevención, y como ediles nos corresponde analizar las sanciones".
Luego el concejal Fernando Vallejos expresó el consenso en el agravamiento en las sanciones, que son únicamente para las de carácter grave: cruzar un semáforo en rojo, exceso de velocidad, conducción en estado de ebriedad, conducción de menores no habilitados.
Por su parte el concejal Luis Ramírez pidió que se incorpore que el valor de la nafta súper sea el de la petrolera de Bandera Nacional YPF, lo que también se consideró adecuado. Más adelante pidió nuevamente la palabra y ante los comentarios en redes sociales de que esas multas se hacen impagables, analizando que "lo que en realidad es impagable es la pérdida de las vidas, lo que es impagable es una familia destruida, un futuro truncado, no una multa", dijo y enfatizó que no se pueden tener 15 o 20 autos demorados por alcoholemia los fines de semana, hay que tomar conciencia de que si se consume alcohol no se puede manejar.
Seguidamente Ariel Pereira apoyó la iniciativa y resaltó el objetivo claro que todos tienen en el cuidado del tránsito y de la integridad física de quienes sufren los accidentes, y puso de ejemplo lo que cuesta a veces recuperarse citando el caso del joven Bruno Escalante, y el de la niña Valentina que perdió la vida en un accidente en la Avenida Rolón.

Siguió poniendo ejemplos y dijo que, si bien será a criterio del juez, una multa mínima por alcoholemia será de 20 mil pesos, con un máximo que será de 60 mil pesos, que generará que piensen antes de conducir luego de haber consumido alcohol; las de picadas o excesos de velocidad será de hasta 40 mil pesos; y que si un padre dio al hijo menor una moto o un auto tendrá que pagar entre 10 mil y 30 mil pesos; que pasar un semáforo en rojo será penado entre 10 mil y 20 mil pesos, y aclaró que no tiene un fin recaudatorio ya que las multas leves y cotidianas se pueden pagar con trabajo voluntario. "Estas medidas son para salvar vidas, ya que los controles de alcoholemia tienen muchos conductores reincidentes, que pagan la multa y recuperan el vehículo, y en su mayoría son mayores de 35 años de edad".
Pidió mayor presencia de inspectores en la calle, pero también responsabilidad de los padres y que aseveró que su aspiración es que en el currículo escolar esté la educación vial.
Mientras que el edil Pablo Ibáñez reflexionó que se está modificando una ordenanza bastante vieja, y más que sancionatorias estas multas son ejemplificativas, ya que hay que buscar que la sociedad tome conciencia, y que se tienen muchas infracciones por conducir en estado de ebriedad los fines de semana, y se tiene que tener la aspiración de que sea cero, concluyendo en que se busca tener en Goya menos accidentes, menos víctimas de accidentes de tránsito.
Pablo Monzón luego de felicitar a todos quienes intervinieron en este trabajo, mencionó que se sigue trabajando en normas para salvar vidas, como ya se hizo con la Avenida Rolón que ya cobró muchas. Coincidió también con su par Ramírez en que los montos que dicen son elevados de las sanciones, no son nada comparado con las pérdidas de vidas, tras lo cual se aprobó por unanimidad con las modificaciones introducidas.