Racing no pudo en Belo Horizonte

Tras las eliminaciones de Huracán, frente a Atlético Nacional de Medellín, en Colombia, con un arbitraje muy adverso, y de River Plate, que anoche no consiguió el triunfo por la diferencia que necesitaba de local contra Independiente del Valle de Ecuador, fue el turno de Racing Club, que viajó a Belo Horizonte para visitar a Atlético Mineiro en la revancha del empate sin goles de la semana anterior en Avellaneda.
Cuando los equipos entraron a la cancha ya esperaba el rival para el ganador en cuartos de final: San Pablo. Si, porque el conjunto brasileño dirigido por Eduardo Bauza se clasificó a pesar de caer derrotado 3 a 1 como visitante con Toluca de México, pues sacó provecho de la goleada 4 a 0 lograda en la ida.
Frente a un rival con antecedentes muy sólidos, la Academia planteó un partido lejos de su arco. Y aunque no logró predominar en el control de la pelota, su juego llegó a complicar a Gremio. De todos modos, una corrida del argentino Lucas Pratto por la derecha, desembocó en un centro bajo que Carlos usufructuó anticipando a su marcador en el primer palo, para dejar sin chance a Nelson Ibáñez, el arquero que de apuro ocupó el arco en lugar de Sebastián Saja, con una molestia en el gemelo izquierdo.
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No lo derrumbó el gol a Racing, que insistió con la propuesta inicial, y rápidamente una falta sobre Lisandro López dentro del área le permitió festejar el empate a través de la ejecución del penal, a cargo del propio Licha, quien remató al medio.
El empate con goles modificó el cuadro de situación inicial, y a favor de la Academia. La pelota continuó siendo patrimonio de Mineiro, aunque las salidas rápidas del conjunto argentino determinaba un equilibrio en lo que respecta a las jugadas de ataque. Igual, en un momento, el juego fue como que pasó a un segundo plano por la presencia de policías en el sector ocupado por la parcialidad visitante, que desencadenó minutos de incertidumbre.
En la segunda etapa jugaron de un arco al otro, y en ese ida y vuelta Pratto movió el arco con un zapatazo desde afuera del área que hizo explotar la pelota en el travesaño; mientras que el arquero salvó ante las sucesivas entradas de Romero y López. Pero volvió a aparecer Pratto, ahora conectando de cabeza un tiro libre, y con eso firmó el triunfo de Mineiro y su clasificación a cuartos de final. El partido siguió apretado hasta el final, porque Ibáñez le tapó a Pratto un penal que pudo ampliar la diferencia.