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BARRIO CAPITALINO GENERAL GÜEMES

Barrendero salvó a una mujer de ladrones: los espantó con la escoba

La tomaron de improvisto cuando se dirigía a cobrar. Sucedió en la capital provincial. Los gritos alertaron a un agente municipal que trabajaba en la zona. Los delincuentes huyeron sin robar.

MERODEABAN ZONA CENTRO Y TENIAN ANTECEDENTES POR ROBOS.

Una mujer de 60 años resultó con severos golpes en su cuerpo producto de la caída a causa de un forcejeo con un delincuente, quien quería apoderase de su "carterita" cuando caminaba sola por calle Lavalle de la capital provincial. A época comentó que solo tenía su documento y tarjeta de colectivo pero que no quiso entregar porque necesitaba para ir a cobrar. Un barrendero que estaba en la zona logró espantar al ladrón a los escobazos. Vecinos piden patrullajes en los barrios.

"Era un pibe que quería sacarme mi carteríta. Ahí solo llevaba mi documento y la tarjeta del colectivo", comenzó su relato M. C., a este medio.

"Estaba yendo a cobrar por lo que no quise entregarle mis pertenencias", agregó.

El ataque sucedió en horas tempranas de ayer cuando transitaba por calle Lavalle, próximo al cruce con Medrano del barrio Güemes de esta ciudad.


LA DAMNIFICADA SALIÓ EN HORAS TEMPRANAS DE SU DOMICILIO.

Un barrendero que estaba en la zona se percató de los gritos y no dudó en ayudarla, con escoba en manos logró que el muchacho -se supo después que estaba acompañado por su cómplice en moto- escapó del lugar sin llevarse algo de la mujer.

"Me corté el labio, y golpee parte del cuerpo al caer pero por fortuna no me rompí ningún hueso. Me acerqué a mi domicilio a pocas cuadras a limpiarme y salir porque necesitaba cobrar", comentó M.C.

A pesar del mal momento, la mujer volvió a salir camino al banco, lugar al que se dirigía más temprano.

"Cuando llegué al banco sentía mucho dolor de cabeza y mi labio volvió a sangrar. Entonces pedí a la mujer policía, que se encontraba allí, que tenga consideración, que me sangraba mi labio y le mostré los golpes. Le expliqué que me habían intentado robar y necesita cobrar e irme al hospital pero solo recibí malos tratos. ‘Vaya a hacer la fila igual’, me dijo. Por suerte un policía me escuchó y me dirigió a la fila de las personas con discapacidad", relató M.C.

A este medio expresó que tras realizar su trámite bancario fue hasta la sala de atención de su barrio en la que la recibieron bien. "Me mandaron reposo y un antiinflamatorio", dijo.

Días atrás en la misma zona otra mujer, mayor de edad, fue víctima de motochorros.

En la oportunidad la arrastraron hasta sacarle su cartera, ocasionándole golpes y raspones.

Ambos hechos no fueron denunciados.

Con antecedentes

Por otra parte, la Policía informó de la detención de dos personas que merodeaban con actitud sospechosa en pleno centro capitalino y que, tras consulta en base de datos, resultó que tenían antecedentes por hechos delictivos.

El procedimiento concretó personal dependiente de la División Antiarrebatos cuando en la mañana de ayer en momentos que realizaba tareas específicas de prevención observó por inmediaciones de calles Junín y Tucumán a dos personas en aparente actitud sospechosa, quienes miraban el interior de los vehículos estacionados.

A modo de prevención, los efectivos procedieron a la identificación.

Tras conocer que tenían antecedentes por robos fueron demorados y trasladados a la comisaría Primera en la que realizaron las actuaciones del caso.

Vecinos justicieros

En la noche de ayer se viralizó una filmación en la cual vecinos del barrio Deportes lograron demorar a un hombre que robó una bicicleta.

"La bici estaba candeada afuera del local donde trabajo. Por suerte pudimos alcanzarlo y recuperar", escribió el damnificado en redes sociales.

Entre vecinos del lugar redujeron al mismo ladrón que hace días atrás lo vieron en otro arrebato, en el cual sustrajo un teléfono celular a una jovencita.

Ambos hechos -señalaron los vecinos- sucedieron en inmediaciones a calle Junín, entre Tucumán y Buenos Aires.

"Llega la noche y por el frío la gente no sale ni siquiera a la vereda. Tendrían que circular los patrulleros en el barrio", dijo una mujer preocupada por los delincuentes que azotan las inmediaciones.

Efectivos policiales fueron alertados de los dos casos.