El fútbol no sabe de merecimientos
Creó situaciones y hasta tuvo un penal a su favor, pero nada de todo lo que se le dio a favor pudo transformar en gol y finalmente Boca Unidos se volvió de Concepción del Uruguay con las manos vacías porque Gimnasia no perdonó, generó una clara y esa fue gol.

Lo decíamos, el fútbol no sabe de merecimientos, porque si así fuese ahora estaríamos contando otra historia, aquella que Boca Unidos se trajo un empate o hasta se podría decir por qué no, una victoria. Pero los merecimientos no existen, los goles o no se hacen, y Boca Unidos tuvo situaciones, pero no pasó de eso y como si con ello no bastase Antonio Medina malogró un tiro penal con un remate que se perdió desviado. Boca Unidos se vuelve con las manos vacías de Concepción del Uruguay, allí le ganó Gimnasia y Esgrima con un gol tempranero, esos que a la postre condicionan marcado a los 5 minutos por Agustín García.
No fue aquel Boca Unidos de alto vuelo que se vio en la segunda parte del partido de la fecha pasada con Juventud Unida, pero sí hizo los méritos como para no volverse sin nada. No pudo ser, pero quedó demostrado que, resultado al margen, se ve otro Boca Unidos.
Otra vez a mirar de lejos a los de arriba y de más cerca a los de abajo, la goleada de Juventud Unida invitó a soñar con que se podía, pero este nuevo revés lo ubica nuevamente a Boca Unidos a tan sólo cuatro unidades del primero que está dejando la categoría.
Los primeros 45 minutos fueron más cortados que jugados, pero curiosamente el árbitro cordobés Jonathan Daniel Correa consideró que no había nada por adicionar y así Gimnasia y Esgrima se fue al descanso con la ventaja que logró sacar a los pocos minutos de haber comenzado el partido.
Se podría decir que ambos equipos estaban en proceso de acomodamiento en el terreno de juego, cuando el "lobo" entrerriano supo sacar ventaja de un desacierto defensivo de Boca Unidos. Por la derecha desbordó Agustín García, por allí no estaban Federico López ni Marcelo Cardozo, por lo que el volante tuvo terreno para avanzar. Apareció Ataliva Schweizer, pero el hábil jugador del elenco entrerriano se encargó de dejarlo en el camino y lo mismo hizo después cuando desesperadamente salió Lucas De León. Con todo el arco a su disposición terminó definiendo García y poniendo arriba a Gimnasia, que por entonces no había hecho prácticamente nada para merecer estar en ventaja. Pero el fútbol no sabe de merecimientos, sino de sacar provecho de las situaciones que se te presentan y el local tuvo una y no la desperdició.
Era volver a empezar para Boca Unidos, pero lo positivo fue que no perdió la marca ni se dejó llevar por la desesperación, intentando seguir con su plan de juego, tocando y buscando al hombre mejor posicionado para arrimar peligró en el arco defendido por Brian Bustos.
Gimnasia volvió a tener una clara situación como para ampliar la ventaja. Fue a los 16 minutos con un remate de Francisco De Souza que cayó en el área y Tomás Rossi casi sin esperarlo, sólo atinó a rematar, pero la pelota terminó en las manos del arquero De León.
Boca Unidos siguió siendo el que más manejaba la pelota, pero no encontraba el camino para romper la última línea de Gimnasia que se agrupaba bien, replegaba a sus volantes y no dejaba espacio para que los hombres del "aurirrojo" le llevasen complicaciones al arco de Bustos.
La más clara de Boca Unidos en la primera parte nació de un pelotazo bombeado de Cristian Maidana para Agustín Lavezzi, que apareció en el área libre de marcas, el delantero toco para la llegada de Juan Rivas y éste sacó el centro para Gabriel Morales, pero el remate del "Gabi" se perdió por sobre el horizontal.
No hubo mucho más, el partido se hizo muy cortado, por las reiteradas faltas en que incurrieron, principalmente los hombres de Boca Unidos, y de allí que llamó la atención que el árbitro cordobés en el minuto 45 decidiese que llegó el final de la primera parte.
La segunda parte no cambió con relación a lo que se vio en la primera, Boca Unidos volvió a disponer de situaciones como para convertir, pero lamentablemente no todo lo que genera el equipo de Roberto Marioni se termina transformando en gol, porque si así fuese otra hubiese sido la historia por contar de este partido. El técnico volvió a darle minutos de juego a Antonio Medina, la carta ganadora que el entrenador que lentamente está volviendo a la competencia.
A los 11 minutos, Lavezzi tuvo un mano a mano con el arquero Bustos, pero el duelo lo terminó ganando este último porque con su derecha tapó el balón que tenía destino de red.
Tras ello un centro de Favio Godoy al área, Lavezzi lo bajó y tocó el balón para Gabriel Morales, pero el remate de éste se perdió junto al palo del arco de Bustos.
La frutilla del postre llegó sobre el final, cuando Leonel López lo bajó a Medina en el área y el árbitro Correa no dudó en marcar el punto del penal. Fue el mismo Medina quien tomó la pelota para hacerse cargo de la pena, pero su remate se perdió por fuera de los límites del campo de juego y todo siguió como antes.
No fue la tarde de Boca Unidos, esta vez no todo lo que tocó terminó en gol. Volvió a generar situaciones y varias de ellas fueron muy claras como para convertir. No se pudo y se vuelve de Concepción del Uruguay con el sabor amargo de la derrota, pero con la convicción de que dejó todo en la cancha como para merecer algo más. Pero el fútbol no sabe de merecimientos.