Gendarme: había restos de pólvora en una remera

El hallazgo del cuerpo de un gendarme, muerto de un balazo en la cabeza en su departamento en la ciudad de Santo Tomé, escribe por estas horas los capítulos cruciales para determinar si se trató de un homicidio, o si por el contrario sigue creciendo la hipótesis del suicidio. Si bien el secreto de sumario rige en torno a la causa, época pudo conocer ayer que en la habitación en la que hallaron el cuerpo del sargento Viveros, había una remera con restos de pólvora. Habría sido colocada en la mano derecha y de alguna forma, absorbió parte del fulminante tras el disparo.
En este contexto, el caso Facundo Cabral podría pedir en los próximos días la realización de una nueva autopsia al cuerpo del sargento, en la que se deberá establecer los ángulos de ingreso del proyectil. Esto, según se cree, podría descartar la hipótesis del homicidio, teniendo en cuenta la gran cantidad de elementos hallados en la casa del gendarme, que forman parte del expediente y que no son revelados por estar bajo secreto de sumario.