El chamamé y el acordeón lloran la partida de Aníbal Maldonado
El prolífico músico y actor capitalino falleció ayer a los 76 años de un infarto. Compuso más de 100 canciones, grabó 30 discos y participó en varias películas. La noticia de su deceso enlutó a todo el mundo chamamecero. Ofelia Leiva lo despidió con sentidas palabras.
El destacado acordeonista correntino, Aníbal Maldonado, falleció ayer dejando un gran pesar en el ambiente chamamecero. El artista de 76 años sufrió un infarto y falleció en horas de la siesta del sábado. Músico, cantante y compositor, Maldonado actuó por última vez en la segunda noche de la 31ª edición de la Fiesta Nacional del Chamamé con una performance destacada, compartiendo todo su talento y pasión por este género con el público.
El gobernador Gustavo Valdés y el Ejecutivo provincial expresaron su pesar y dolor por el fallecimiento del destacado artista chamamecero, que a través de su trayectoria dejó un calificado legado en pos de esta expresión cultural correntina.

"Qué mala racha estamos pasando, Aníbal es de esos enormes artistas que deja un profundo dolor y un gran vacío", expresó a época Ofelia Leiva. La artista fue por muchos años vecina de la familia Maldonado. "Vivíamos en la cuadra de calle Brasil, entre Rivadavia y avenida Ferré, éramos muy amigos", dijo. A esto recordó que "Aníbal era muy amigo de Coqui porque Tránsito Cocomarola vivía a la vuelta, me acuerdo que desde chiquitos tocaban juntos el acordeón, cuando tenían 12 o 13 años se escapaban en bicicleta a tocar en bailantas a escondidas porque a Tránsito no le gustaba. Son pocos los que nacen con ese don", recordó Leiva.
Incansable difusor y compositor, Maldonado comenzó desde muy pequeño por el camino del acordeón y con apenas
16 años ya integraba formaciones de músicos. En el año 1987, cuando Juan Pablo II visitó Corrientes, Maldonado ejecutó la "Misa Criolla". "Estuve 55 minutos junto a Su Santidad, bien cerquita porque como llovía torrencialmente, me tuve que guarecer bajo el techo que era breve de espacio. Me regaló entonces un rosario y bendijo mi acordeón. El camino se hizo más grato desde entonces", había expresado el músico.
Como actor participó en películas como "Historia mínimas" (2002), "El camino de San Diego" en 2006, ambas dirigidas por Carlos Sorín, e "Isidro, la leyenda de Velázquez" en 2010 dirigida por el correntino Camilo Gómez.

Compartió trabajos musicales con Los Hermanos Barrios, Tránsito Cocomarola, Avelino Flores, Antonio Niz, Bruno Mendoza, entre tantos otros. Compuso más de 100 obras entre las que se destacan "Buen día Mburucuyá", "Levantando el avispero", "Ausencia y soledad", "Corrientes, mi tierra hermosa", "El pindó", "Mesopotamia" y "Pago Florentín", entre otras. Grabó más de 30 discos. Uno de sus proyectos más destacados fue con Ramona Galarza, con quien grabó cinco discos. Juntos compartieron escenarios y mantuvieron una relación artística por más de 20 años.