Haití dominada por la pobreza a diez años del terremoto arrasador

El 12 de enero de 2010, poco antes de las 17, Puerto Príncipe sufrió un sismo con epicentro a 15 kilómetros de distancia que destruyó gran parte de su superficie. Nada cambió desde ese entonces, el país sigue sumergido en la pobreza y la anomia. Aún hoy, unas 34.000 personas, según cálculos de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), siguen viviendo en una situación similar a la de una década atrás. Entre 4.000 y 7.000 personas sufrieron amputaciones después del terremoto, de entre los más de 350.000 heridos registrados, y la mayoría de ellos sufre discriminación, la dificultad de acceso a los servicios básicos y al mercado de empleo. Cerca de 1,5 millones de personas se quedaron sin hogar y fueron alojadas en unos 1.500 asentamientos temporales, entre ellos el gigantesco campamento Champ de Mars, frente al Palacio Nacional, que tardó más de dos años en ser desmantelado. Al menos 11.581 millones de dólares fueron canalizados en 2.552 proyectos de reconstrucción. Los fondos gestionados a través de las ONG fueron incalculables, incontrolados y, en muchos casos, mal gestionados. El politólogo Jean Ronald Joseph, de la Universidad Estatal de Haití, dijo a la agencia de noticias EFE que "la gestión del sismo por el Gobierno en esa época y también por la comunidad internacional fue un desastre. Se desarrolló un negocio humanitario y se robaron un montón de plata". Haití también sufrió una grave epidemia de cólera, importada en 2010 por los cascos azules de Nepal, que infectó a 520.000 personas y causó la muerte de por lo menos 7.000. Haití era y sigue siendo el país más pobrede América. En los últimos diez años el PIB per cápita ha mejorado ligeramente, pasando de 662 dólares a 765. Sin embargo, el porcentaje de la población que vive con menos de dos dólares al día sigue estable por encima del 60%, y el riesgo de padecer hambre está en aumento por las crisis, las malas cosechas y la inflación. La ONU calcula que 3,7 millones de haitianos, en una población de cerca de 10,5 millones, padece inseguridad alimentaria, y un quinto de la población, cerca de dos millones de personas, se ha visto forzado a emigrar. El país vivió constantes protestas violentas entre septiembre y noviembre que paralizaron prácticamente todas las actividades de las instituciones públicas y privadas del país.
Tras las réplicas de sismos de 5,9 grados en Puerto Rico

Un nuevo sismo, esta vez de 5,9 grados en la escala de Richter, sacudió ayer a Puerto Rico, que desde la tarde del viernes registra réplicas de diferente intensidad como consecuencia del terremoto de 6,4 que golpeó la isla el pasado martes y causó una muerte y la evacuación de cerca de dos mil personas. La Red Sísmica de Puerto Rico informó que el sismo tuvo su epicentro entre entre la latitud 17,937 y la longitud -66,717 a una profundidad de 32 kilómetros, a 14,8 kilómetros al Sur de Peñuelas, y a este le siguieron cuatro réplicas, dos de las cuales fueron muy intensas superando los cuatro grados de magnitud. Asimismo, el organismo aseguró que no hay aviso, advertencia o vigilancia de tsunami para el país e Islas Vírgenes por el momento. El martes pasado un fuerte terremoto de 6,4 grados sacudió a Puerto Rico y provocó la muerte de un hombre de 73 años, la evacuación de 2.000 personas, numerosos daños materiales y el corte de energía eléctrica en toda la isla caribeña por más de 24 horas. Tras ese primer sismo se registraron decenas de réplicas, que desde el viernes a la tarde se incrementaron en frecuencia y en magnitud lo que mantiene en vilo a la población, en especial en los municipios del Suroeste del territorio caribeño, donde crece el temor ante la continuidad de los temblores. Según datos del organismo, la réplica más destacada se registró ayer a las 18:30 hora local (19:30 de argentina) con una magnitud 5,2 que se sintió en todo Puerto Rico, lo que generó gran sobresalto entre la población, según informó la agencia EFE. También se registró un temblor con epicentro a 7,04 kilómetros al Sur de Guayanilla con una magnitud de 4,8, y otro de 4 grados, este último a una profundidad de 7 kilómetros y a 13 kilómetros al Sureste de Guayanilla.